No sé si fueron los continuos piropos de los aduladores cubanos (aproximadamente cada 40 segundos contados nos decían algo), o el colorido de los edificios (los que no se estaban cayendo a trozos), o los músicos tocando casi en cada esquina de la ciudad, o las riquísimas piñas coladas, pero si tuviera que decir, en una sola palabra, lo que me transmitió La Habana sería «Alegría». Por eso aquí os contamos que visitar en la Habana.
Aterrizamos en La Habana sobre las 21 horas. Mi primera impresión de la ciudad fue que había retrocedido en el tiempo y no solo las 6 horas de diferencia horaria con España, sino más de medio siglo.
Poco queda de las elegantes mansiones y centros comerciales de la época dorada de La Habana. En su lugar encontramos edificios que se caen a pedazos, pequeñas tiendas con estantes vacíos por la escasez de suministros, coches de 70 años de antigüedad de estrambóticos colores, gente pasando el tiempo en la calle sin nada que hacer… Una ciudad en la que se respira historia y decadencia, pero con un encanto sin igual.
La Habana enamora y desespera a partes iguales. Te sacarán de quicio y te reirás al máximo. No volverás jamás o iras un montón de veces a lo largo de tu vida, encontrando la ciudad casi en el mismo punto donde la dejaste.
Sin duda, yo soy de lo segundo… ¿Y vosotros?
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Índice
- Que visitar en La Habana
- Parque Fe del Valle
- Capitolio Nacional de Cuba, un imprescindible que visitar en La Habana
- Paseo de Martí, el lugar más fotografiado que visitar en La Habana
- Parque Central,un must que visitar en La Habana
- Memorial Granma
- Callejón de los peluqueros, la mejor callecita que visitar en La Habana
- Catedral de la Habana, el edificio más bonito que visitar en La Habana
- La Bodeguita del Medio, un lugar tradicional que visitar en La Habana
- Plaza de Armas
- Calle Obispo, la calle más popular que visitar en La Habana
- Plaza Vieja, la plaza más pintoresca que visitar en La Habana
- Visitar el malecón de La Habana
- Castillo del Morro
- El Floridita, los mejores daiquiris de La Habana
- Callejón de Hamel
- Parque Almendares: Bosque de la Habana
- Plaza de la Revolución, la plaza más grande que visitar en La Habana
- Hotel Nacional, el hotel más turístico que visitar en La Habana
- Calles de Habana Centro
- La Habana de noche
- Mapa turístico de los lugares que visitar en La Habana
- Información adicional para visitar La Habana
- Vídeo: que ver y hacer en La Habana
- Ahorra ✈️🌎: descuentos y hoteles para visitar La Habana
Que visitar en La Habana
Entre la larga espera para pasar el control de aduanas, el traslado hasta nuestro alojamiento e instalarnos en la habitación, se nos hizo super tarde. Así que cenamos algo rápido, tomamos nuestros primeros mojitos y nos fuimos a dormir. Teníamos dos días enteros para conocer La Habana y los íbamos a exprimir al máximo.
Para que os podáis orientar, La Habana tiene 3 partes principales que tenéis que conocer: Habana vieja, Habana centro y Vedado. A la Habana vieja le tendréis que dedicar, al menos un día. A las otras dos bastará con medio día para cada una.
La Habana Vieja es la zona más cuidada y bonita de la ciudad. A pesar de ser la más antigua, muchos de sus edificios están restaurados.
Es fácil identificar cuando acaba la Habana vieja y empieza Habana centro, pues se empiezan a ver edificios que se caen a trozos, sucios y calles sin asfaltar.
El Vedado es la zona más moderna de la ciudad, donde encontraréis los grandes hoteles, casas señoriales que recuerdan que la clase media alta debió vivir en ese barrio, los restaurantes más selectos incluso algún centro comercial, en el que si vais a principio de semana podréis encontrar casi de todo. A finales de semana ya los productos se van agotando y comienzan a verse las estanterías vacías. Está claro que Cuba no es un destino para ir de shopping.
Si no queréis recorrer la ciudad por libre, podéis hacer una visita guiada por La Habana, en la que un guía os mostrará, durante 3 horas, los principales puntos de la ciudad. La podéis reservar AQUÍ.
Parque Fe del Valle
Nos hospedamos en una casa en plena Habana Vieja y queríamos empezar a conocer la ciudad por ahí. Pero necesitábamos decir a nuestras familias que habíamos llegado bien, así que conseguimos unas tarjetas de internet en una tienda de Habana centro y nos dirigimos al Parque Fe del Valle, que era (según ellos) el punto wifi más potente de la ciudad. No os quiero ni contar como son el resto…
Nos orientamos con un mapa, pero cuando vimos un montón de gente con sus móviles agrupada en el parque tuvimos claro que era el lugar que andábamos buscando.
Una vez colgada la foto en facebook de que habíamos llegado sanas y salvas comenzamos a recorrer la Habana Vieja.
Capitolio Nacional de Cuba, un imprescindible que visitar en La Habana
Lo primero que visitamos fue el Capitolio, que marca el límite entra Habana vieja y centro. Recuerda mucho al de Washington, ya que está inspirado en él, pero es un metro más alto, un metro más ancho y un metro más largo.
Inicialmente era la sede del Congreso Cubano, pero desde la revolución ha albergado la Academia Cubana de las Ciencias y la Biblioteca Nacional de Ciencia y Tecnología.
Cuando nosotras fuimos (junio 2107) estaba en restauración y me consta que aún continua, pero en Cuba usan poco internet como para actualizar esta información, así que tal vez cuando vayáis a visitarlo os lo encontréis abierto.
Paseo de Martí, el lugar más fotografiado que visitar en La Habana
Justo en frente del Capitolio encontraréis una de las postales más fotografiadas de la Habana, unos bonitos edificios restaurados de llamativos colores.
En los bajos encontraréis algunas cafeterías (si es que se pueden llamar así) y una mini heladería donde podéis pedir cualquier sabor de helado, y amablemente os servirán uno de fresa. Yo pedí uno de vainilla y uno de chocolate y me sirvieron dos de fresa… pues, en realidad, es lo único que tienen. Lógica cubana mi amol 😉
Parque Central,un must que visitar en La Habana
Junto al Capitolio se sitúa el Parque Central, desde el que parte el Paseo del Prado que lleva hasta el inicio del malecón.
Allí encontraréis hileras de coches clásicos de los años 40-50 (llamados almendrones), que se dedican a dar paseos turísticos por la ciudad por un módico precio de 20-25 CUC/2 horas, según lo buenos que seáis para regatear.
Normalmente, ellos te asedian y te ofrecen un itinerario pero puedes pactar los lugares a los que quieres ir, como hicimos nosotras. Aunque como queríamos primero conocer la parte vieja de la Habana, no hicimos este recorrido hasta el día siguiente.
Memorial Granma
Caminamos por la calle Agramonte hasta toparnos con unos tanques y aviones militares, expuestos en unos jardines que forman parte del museo de la revolución, conocidos como memorial Granma.
Nosotras decidimos no entrar porque preferíamos seguir callejeando, pero si os gustan los museos dicen que este es bastante interesante.
Callejón de los peluqueros, la mejor callecita que visitar en La Habana
Al lado de la Plaza 13 de marzo, al principio de la calle Aguiar, hay una calle bohemia y pintoresca que no pasa desapercibida: el callejón de los peluqueros.
Este callejón cuenta con varias galerías de arte, tiendas de artesanía cubanas y locales de barberías y peluquerías. Todo esto gracias al proyecto Arte Corte que vincula el arte con la historia de la peluquería y barbería, que logró realizar Papito, un peluquero del barrio.
Un lugar curioso, alejado de los turistas, que hay que visitar en La Habana.
Catedral de la Habana, el edificio más bonito que visitar en La Habana
Nos fuimos metiendo por las callecitas hasta llegar a la Plaza de la Catedral. En esta plaza encontraréis varios Palacios, pero sin duda el edificio que más destaca es la Catedral de San Cristobal, con sus dos torres asimétricas.
Para su construcción se utilizó roca de coral que se extrajo del Golfo de México, por lo que se pueden encontrar algunos fósiles marinos en la fachada principal del edificio.
La Catedral abre de 9 a 17 horas (respetarán el horario??). La entrada es gratuita, pero si queréis subir al campanario tendréis que pagar 1 CUC.
La Bodeguita del Medio, un lugar tradicional que visitar en La Habana
Casi al lado de la Catedral, en la calle Empedrado se encuentra la mundialmente famosa Bodeguita del Medio.
En este local tocan música en directo y sirven los mejores mojitos de Cuba, según Hemingway «Mi mojito en la Bodeguita, mi daiquiri en El Floridita». Aprovechando la fama, cobran los mojitos a 5 CUC. Para mi no son nada del otro mundo, pero es algo típico que tenéis que hacer en La Habana.
La verdad que el local en sí, tiene un encanto especial. Las paredes están llenas de firmas de todos los personajes célebres que han pasado por allí.
La Bodeguita está abierta de 8 a 12 de la noche. Si vais a media mañana la encontraréis abarrotada de gente, por lo que os recomiendo ir sobre las 22 horas.
Plaza de Armas
Situada entre las calles O´Reilly y Obispo, muy cerca de la plaza de la Catedral, nos encontramos con un bonito parque, rodeado de tiendas de libros de segunda mano: la Plaza de Armas.
En el extremo de la plaza se encuentra el Castillo de la Real Fuerza, que alberga el museo de navegación. Pero hay tanta vida en las calles de La Habana, que ni por un momento nos planteamos meternos en ningún museo.
Me encantó el ambiente de la plaza, con las cubanas super coloridas sentadas en un banco, conversando.
Calle Obispo, la calle más popular que visitar en La Habana
De la Plaza de Armas parte la Calle Obispo, la calle más popular y auténtica de La Habana, donde el olor a comida criolla se mezcla con el olor a puro. El sonido de la música cubana se fusiona con el ruido de los transeúntes. El llamativo colorido de sus edificios destaca sobre el empedrado del suelo.
Donde uno no encuentra el ángulo perfecto para tomar la foto, ni el instante para grabar un vídeo. Y cuando te das cuenta que es imposible transmitir la esencia de la calle Obispo, guardas la cámara, comienzas a vibrar con su música y a guardar todos los momentos en la mente y en la retina y sabes que no lo olvidarás jamás. La calle Obispo hay que vivirla!!!
La calle, que se extiende desde la Plaza de Armas hasta la Avenida del Puerto (justo donde se encuentra la Floridita), está repleta de galerías de arte, tiendas, bancos, bares de música en directo… donde los turistas se mezclan con los habaneros.
Si tuviera que elegir un punto de esta calle sería «la mercería azul», situada en la esquina de Obispo con mercaderes, junto al famoso hotel Ambos Mundos donde Hemingway escribió algunas de sus novelas.
En esta animada esquina es muy probable que encontréis un grupo de músicos cubanos tocando en directo. Me podría haber pasado horas allí!!
Plaza Vieja, la plaza más pintoresca que visitar en La Habana
Una vez logramos salir de la calle Obispo, que nos tenía atrapadas, continuamos por la calle mercaderes hasta llegar a la Plaza Vieja.
En ella encontraréis coloridos edificios modernistas perfectamente restaurados, que según dicen están inspirados en los diseños de Gaudí, en Barcelona.
La Plaza Vieja está rodeada por importantes edificios como el Palacio del Conde de San Juan de Jaruco, el palacio Cueto, el Museo de Naipes, la Fototeca de Cuba y el planetario de La Habana.
Pero dejando al margen la parte cultural de la Plaza, yo os recomiendo sentaros a comer en terraza de La Factoría, que es una fábrica de cerveza artesana con música en directo, mientras disfrutáis del ambiente de la pintoresca Plaza Vieja.
No se si fueron las cervezas, la comida o todos los mojitos que habíamos acumulado durante la mañana (y que no os he contado 😉 ) o el calor, o tanto andar, o una mezcla de todo, pero nos moríamos de sueño. Así que volvimos a la casa para dormir una siesta… Hay que llevar las costumbres españolas a cualquier parte del mundo, no os parece???
Visitar el malecón de La Habana
Después de una reparadora siesta, caminamos por todo el Paseo del Prado hasta llegar al Malecón. Desde allí teníamos unas magníficas vistas al Castillo del Morro.
Mientras trataba de hacerme una foto, un grupo de cubanos que, por supuesto, se había «enamorado» de nosotras nos tocaban una canción. Cosas que solo pasan en Cuba!!!!
El malecón de la Habana tiene más de 8 kilómetros de longitud, pero es desde donde acaba el Paseo del Prado hasta el famoso Hotel Nacional de Cuba dónde se concentra más gente. La mejor hora para recorrerlo es al caer el sol. A los habaneros les encanta reunirse allí con sus amigos, para bailar al son de la música hasta bien entrada la noche.
Nuestra idea era llegar caminando hasta el Hotel Nacional, pero hacía demasiado calor así que tomamos un taxi para volver a la Habana Vieja.
Castillo del Morro
Aunque nosotras no fuimos, el Castillo del Morro es un lugar muy recomendable que para visitar en la Habana. Desde esta fortaleza obtendréis unas impresionantes vistas panorámicas sobre el mar y la ciudad.
Además desde la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, situada junto al Castillo del Morro, todos los días a las 21 horas se realiza la ceremonia del cañonazo que recuerda el disparo de cañón que en la época colonial anunciaba el cierre de las murallas que rodeaban la ciudad durante la noche, para evitar ataques de piratas.
El Floridita, los mejores daiquiris de La Habana
Esa noche decidimos cenar algo rápido en alguna de las ventanas de la Calle Obispo. Luego, en modo guiri total, tomamos un mojito en La Bodeguita y un daiquiri en El Floridita, siguiendo los consejos de Hemingway.
Orientadas por unos cubanos terminamos la noche bailando salsa (bueno yo no, porque el baile no es lo mío) en una discoteca llamada Bar Asturias, situada dentro del centro asturiano, que está en Prado 309 esquina Virtudes.
Callejón de Hamel
A pesar de la fiesta de la noche anterior nos levantamos a una hora bastante prudencial. después de un rico desayuno repleto de frutas tropicales, salimos hasta el Parque Central para alquilar uno de esos autos antiguos que nos habían enamorado.
Por supuesto, elegimos el rosa 🙂 Negociamos otra ruta con ellos y, con la melena al viento cual actrices de los años 50, comenzamos el paseo por el Malecón. De ahí, pedimos que se desviaran hasta el Callejón de Hamel, situado en la barriada de cayo hueso, entre las calles Hospital y Aramburu.
El callejón debe su nombre a Fernando Belleau Hamel, que compro unos terrenos en la barriada y dio trabajo a mucha población negra y china. Este callejón se convirtió en un espacio de difusión de la cultura afrocubana, gracias a un escultor-muralista que pintó murales donde plasmó la esencia de la cultura afrocubana, las carencias y los deseos y las ambiciones de las personas que viven en el callejón.
Este callejón, que recuerda en parte a la comuna 13 de Medellín, está repleto de frases y poemas escritos sobre muros de llamativos colores y curiosas esculturas, tales como bañeras, bicicletas, maniquíes…
Si tenéis la oportunidad, el mejor momento para visitarlo es el domingo a mediodía, ya que realizan actuaciones musicales en directo.
Parque Almendares: Bosque de la Habana
Nuestra siguiente parada fue el Parque Almendares, más conocido como Bosque de La Habana. Este bonito parque es el pulmón de La Habana.
Es el lugar ideal para desconectar del bullicio de la ciudad y perderse entre su frondosa vegetación. Vale la pena hacer una pequeña parada para conocerlo.
Plaza de la Revolución, la plaza más grande que visitar en La Habana
Tras bordear el Cementerio de la Habana, en el que decidimos no entrar, llegamos a la archiconocida Plaza de la Revolución.
Con 7200 metros cuadrados es una de las plazas más grandes del mundo. En ella podréis ver dos edificios, uno con un relieve del Che Guevara y otro con un relieve del guerrillero Camilo Cienfuegos, y una estatua en honor a Jose Martí.
No es nada del otro mundo, pero es una visita indispensable que hay que ver en La Habana.
Hotel Nacional, el hotel más turístico que visitar en La Habana
Pedimos a nuestro chófer que nos dejará en el mítico Hotel Nacional, situado en pleno barrio del Vedado.
La diferencia de Vedado con las otras zonas de La Habana es abismal, son todo grandes hoteles y avenidas copiadas del modelo americano. Como barrio es bonito, pero no tiene el sabor cubano de los otros.
El lujo y la elegancia se mantienen en este hotel, casi un siglo después de la inauguración. Lo que comenzó siendo un hotel con un casino de lujo, en pleno Caribe, se ha convertido hoy en un desfile de adinerados guiris británicos con sandalias y calcetines blancos y puede que algunos famosos.
Pero aún así, merece la pena visitar este edificio declarado Patrimonio de la Humanidad, donde las vistas al malecón desde los jardines de su colina son espectaculares.
El hall y los salones del hotel os transportarán a la época de Al Capone, incluso podréis ver alguna bala insertada en la pared de alguno de los tiroteos que se produjeron allí.
Calles de Habana Centro
Después de dar un paseo por el Vedado y tomar un enorme helado en la famosa Coppelia, decidimos tomar una guagua hasta el centro de la Habana. Y os puedo asegurar que fue toda una experiencia.
Apretados cual sardinas y asados como pollos, pues el aire acondicionado no existe en esos buses. No os puedo decir exactamente lo que nos costó el billete (el precio era como 10 céntimos de euro creo) porque no lo pagamos. Nos empujaron hacia adentro del bus y cuando dijimos que no habíamos comprado el ticket, un señor dijo que nos lo había pagado él. Eso sí, no se despegó de nosotras en todo el trayecto 🙂
Bajamos cerca del Capitolio, pero antes de volver a La Habana Vieja, nos adentramos por las calles de Habana Centro. Ahí vais a ver un montón de escenas cotidianas de La Habana, sin mucho turista de por medio.
Es ahí, donde nos dimos cuenta de que los cubanos beben de todo menos agua. Nos resultó tarea imposible encontrar una botella de agua!!! Íbamos de tienda en tienda preguntando «por favor, una botella de agua. No tengo, ¿quiere ron?» Y cuando por fin la encontramos en un bar de mala muerte, nos cobraron 2 CUC.
Se nos había hecho tarde, así que fuimos directas a comer al Hotel Ambos Mundos que nos habían recomendado. Había espectáculo en directo, por lo que nos quedamos un buen rato allí.
La Habana de noche
Después de la obligada y tardía siesta, nos arreglamos para ir a cenar. La Habana es una ciudad que hay que disfrutar tanto de noche, como de día.
Nuestros caseros nos habían recomendado un lugar por el Vedado llamado el Cocinerito, al que había que ir pronto para, posteriormente, disfrutar de una animada fiesta el La fábrica de Arte Cubano, situada justo al lado del restaurante.
La mala suerte fue que ese día no abrieron la fábrica, así que tomamos un taxi de vuelta después de la cena y nuestro taxista nos aconsejó ir a tomar unas copas al Café Roma, que os recomiendo 100%.
Con esto terminó nuestra estancia en La Habana, ya que al día siguiente partíamos para Viñales. Dos semanas más tarde, antes de abandonar Cuba, volvimos a La Habana para recorrer de nuevo algunos rinconcitos de la ciudad.
➡ Si preferís podéis hacer un tour de cócteles por La Habana para probar los tragos más famosos. Lo podéis reservar AQUÍ.
Los que nos leáis habitualmente sabréis que siempre pongo información acerca de horarios de visita y precio de entrada a los diferentes puntos de interés.
Daros esta información en Cuba sería muy osado por mi parte, ya que normalmente no lo respetan. así que hay ir a los sitios a probar suerte… Lo bueno es que con un mojito la espera siempre se hace más corta 🙂
Mapa turístico de los lugares que visitar en La Habana
Aquí os dejo un mapa con todos los puntos de interés que visitar en La Habana que os voy a contar en este post, para que os podáis orientar un poquito.
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Información adicional para visitar La Habana
Museos de La Habana
Para mi es impensable meterme en un museo en La Habana, con toda la vida que hay en sus calles. Pero, hay un montón de museos en La Habana que podéis visitar. Os dejo aquí un listado de los que me parecen más interesantes:
- Museo de la Revolución: en él podréis conocer la historia de Cuba desde la cultura precolombina de Cuba hasta el régimen socialista actual. Abre todos los días de 9,30 a 16 horas.
- Museo del Ron Havana Club: os mostrarán el proceso de la fabricación del ron. El precio de la entrada incluye una degustación. Abre de lunes a jueves de 9,30 a 16 horas. De viernes a domingo de 9 a 16 horas.
- Cámara Oscura: podréis ver La Habana en una imagen capturada por las lentes y el espejo de un periscopio. Abierto de lunes a sábado de 10 a 17,20 horas.
Cómo moverse en La Habana
La Habana es una ciudad grande, pero cada una de sus zonas principales podéis (y debéis) recorrerlas a pie. Los paseos en La Habana son siempre sorprendentes.
Para desplazaros de una zona a otra tenéis varias opciones:
- Cocotaxi: estos carritos «con sabor a trópico» son unos curiosos triciclos a motor. Por supuesto, os recomiendo coger alguno en algún momento del viaje. Recordad pactar el precio antes.
- Taxi: los taxis en Cuba no son nada baratos, pero si tenéis que cogerlo negociad antes el precio con el conductor a menos que lleve taxímetro.
- Coches antiguos o almendrones: un recorrido en uno de estos coches es algo obligado que hay que hacer en La Habana, así que podéis pactar que os dejen en un zona diferente para ahorraros el taxi.
Dónde alojarse en La Habana
Como ya os he comentado a lo largo del post, La Habana tiene tres zonas principales (tiene más pero son zonas residenciales muy alejadas y sin ningún punto de interés turístico).
Si queréis un viaje auténtico, tenéis que alojaros en casas de cubanos en La Habana vieja. Lo ideal es lo más cerca posible a la calle Obispo, que es donde más vida hay. Yo me alojé en la Casa de Alexis y Mari, situada en San Juan de Dios 106, que recomiendo totalmente. Sus propietarios son encantadores y os harán sentir como en vuestra propia casa.
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Si vuestro presupuesto es más ajustado, encontraréis los alojamientos más baratos en Habana Centro.
Si preferís algo más convencional, como hoteles de grandes cadenas más modernos, os tendréis que alojar en Vedado.
Dónde comer en La Habana
- Coppelia (Avenida 23/calle L): en esta famosa heladería que salió en la película «Fresa y chocolate» podréis degustar 5 bolas de helado por menos de 1 CUC. Hay varias entradas, una para turistas donde no guardaréis cola, pero pagaréis 5 veces más. Y las otras entradas para cubanos, cuyo tiempo de espera es de casi 1 hora.
Yo os recomiendo esta segunda opción, no solo por ahorraros unos euros, sino porque os integraréis con ellos (una hora da para mucho) e incluso os sentarán en la misma mesa. Solo hay 3 sabores al día para elegir y lo sirven con una especie de galleta triturada por encima que está buenazo!!! Abren de 9 a 20 horas.
- Factoría de la Plaza Vieja (Plaza vieja): podréis degustar una cerveza artesanal, acompañada de unos ricos pinchos de carne, con música en directo.
- Paladar Doña Eutimia (callejón del chorro): este es uno de los paladares más famosos de a Habana. Probaréis la auténtica comida cubana casera, a pecios muy económicos.
- El cocinero (calle 26/calle11): comida internacional con un toque cubano, a precios europeos. La verdad es que cenar en su terraza es super agradable y es el lugar ideal para empezar la velada y continuar luego con la fiesta en la fábrica de arte cubano.
➡ Un buen plan es realizar un tour de 4 horas de comida callejera por La Habana. Lo podéis reservar AQUÍ.
Vida nocturna en La Habana
En la Habana hay fiesta 24 horas al día, 365 días al año. Y es que la fiesta la llevan en la sangre. Aunque vais a encontrar un montón de locales, con música en directo, hay algunos míticos que no os podéis perder como la Bodeguita del medio y El Floridita, que ya os he comentado a lo largo del post, y algunos que van cambiando según la moda. Ahora los más famosos son:
- La fábrica de Arte Cubano (calle 26/calle11): además de fiesta los fines de semana, en este espacio encontraréis exposiciones de pintura y fotografía, presentaciones de libro… un poco de todo.
- Bar Roma (calle aguacate casi esquina con O´Reilly): en pleno corazón de la Habana, encontraréis un edificio que, aunque se cae a trozos, está habitado por familias. Os subirán a un montacargas hasta la azotea de la comunidad, donde han puesto una barra y un DJ, así que os podréis tomar un mojito con vistas a La Habana Vieja.
Si necesitáis ir al baño y está ocupado, no os preocupéis!! Los vecinos del último piso dejan la puerta de su casa abierta y por unos céntimos os venden un poquito de papel y os dejan entrar a su baño. Surrealista no??? 🙂
Si sois más de grandes discotecas en el Vedado podréis encontrar múltiples opciones como Tropicana, el gato tuerto, salón rojo del hotel Capri… A mi esto no me convence mucho ya que está lleno de turistas y de «jineteros» que intentan venderte de todo, pero para gustos los colores.
De todas formas, creo que lo mejor es preguntar a la gente de allí y que os aconsejen los lugares de moda donde ir.
Si queréis saber más información general sobre Cuba, podeís leer el post «Bienvenida a Cuba, mi amol» donde hay una guía completa para organizar vuestro viaje a Cuba.
Vídeo: que ver y hacer en La Habana
Por último os dejamos con este vídeo de las 20 cosas imprescindibles que ver y hacer en La Habana.
Espero haberos arrancado una sonrisa leyendo las anécdotas cubanas de este post y, sobre todo, haberos contagiado las ganas de conocer La Habana. Cualquier duda o sugerencia, nos podéis escribir en los comentarios.
No olvidéis compartir con los demás viajeros!!! 🙂
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